Desde que Ikea llegó a nuestras vidas, la decoración escandinava no para de entrar en nuestras casas. Se basa en el “menos es más”, en la colocación de objetos sencillos y principalmente en formas geométricas, y la gama de colores va desde el blanco hasta el negro, pasando por los grises y con toques en madera. La madera aporta calidez a nuestras estancias, y personalmente, los salones con este tipo de decoración me vuelven loca. Los sofás llenos de cojines de diferentes tonos y texturas, mesitas con flores presidiéndolas y aportando esa frescura y color que queremos para nuestros salones, son parte de los detalles que nos ofrece la decoración escandinava a nuestros salones, tal y como se muestra en las fotos que he seleccionado para que os sirvan de inspiración.
Imágenes vía: Google imagenes, Elle deco, ¿?